Olvida todo lo que sabes sobre redactar correos. La IA asume las tareas rutinarias —desde generar audiencias y personalizar contenidos hasta optimizar envíos— para que tú te enfoques en la estrategia. No se trata solo de agilizar el email marketing, sino de reinventar la manera de interactuar con las personas y potenciar conversiones gracias a datos unificados y análisis inteligentes.